La cocina cannábica es el arte de preparar alimentos y bebidas con infusión de cannabis. Para ello se utiliza diferentes partes de la planta, como flores, hojas y concentrados, para agregar un toque psicoactivo a platos cotidianos. Esta práctica no es nueva; sus raíces se remontan a culturas antiguas que utilizaban el cannabis tanto en rituales como en medicina. Aquí te dejamos toda la información y mejores consejos para cocinar con marihuana.
Beneficios, usos y preparaciones básicas de ingredientes cannábicos
El papel de la cocina cannábica en la cultura actual ha crecido mucho. Con la legalización del cannabis en varios países y estados, más personas están experimentando con recetas infundidas. La razón detrás de su popularidad es doble: combina el gusto por la gastronomía con los efectos relajantes o recreativos del THC, el principal componente psicoactivo del cannabis. Además, al usar el cannabis en alimentos ofrece una duración del efecto más larga en comparación con otros usos.
Recetas de Cannabis
Explorar la cocina cannábica es adentrarse en un mundo donde creatividad y ciencia se encuentran para ofrecer experiencias únicas y deliciosas.
Aceite de cannabis
El aceite de cannabis es una base versátil para platos y aderezos. Para infusionar con cannabis:
- Descarboxilar el cannabis calentándolo a 120°C durante 40 minutos.
- Mezcla el cannabis con aceite de oliva en una cacerola a fuego lento.
- Cocina a baja temperatura por aproximadamente 2 horas.
- Colar la mezcla para eliminar los restos vegetales.

Si no se tiene tiempo de elaborar esta receta o se necesita inmediatamente el producto, también se puede comprar los mejores aceites de CBD y semillas de marihuana en GB The Green Brand. Aunque, por la gran concentración de éstos, se aconseja utilizar sólo unas gotas.
Mantequilla de marihuana
La mantequilla de marihuana es esencial en la cocina cannábica. Se puede usar en galletas, brownies y mucho más. Cómo hacerla:
- Realizar la descarboxilación del cannabis igual que en la receta anterior.
- Derretir mantequilla en una cacerola y añadir el cannabis.
- Cocina a fuego lento durante al menos 2 horas.
- Colar y refrigerar.
Aceite o mantequilla de hachís
El hachís es un ingrediente concentrado con un sabor distintivo que puede elevar cualquier plato. Infusionar el hachís en mantequilla o aceite para crear bases potentes, pudiendo agregarlo a diferentes platos.

Manteca de cannabis
La manteca de cannabis aporta riqueza a las creaciones culinarias, siendo ideal para platos salados. Su preparación es similar a la de la mantequilla de marihuana simplemente se derrite la manteca de cerdo y se añade cannabis descarboxilado. Se cocina a fuego lento por varias horas, cuela y utiliza según sea necesario.
Leche de marihuana
La leche infusionada es perfecta para postres y batidos, aportando cremosidad con un toque especial. Cómo hacerla correctamente:
- Hervir agua y añadir hojas secas o cogollos descarboxilados para limpiarlos.
- Incorporar esta mezcla en leche caliente sin llegar a hervir.
- Colar y refrigerar.
Flores de cáñamo tostadas

Las flores de cáñamo pueden decorar y añadir sabor a platos gourmet, pero primero se debe activar correctamente el THC. Saltear finamente las flores picadas en mantequilla o aceite hasta dorar ligeramente.
Miel de marihuana
La miel infusionada endulza las comidas con un toque psicoactivo delicioso. Para prepararlo se deben seguir los siguientes pasos:
- Derretir la mantequilla e incorporar el cannabis picado.
- Cocinar lentamente hasta que adquiera un tono verdoso.
- Filtrar la mezcla, añadir miel, remover bien y enfriar antes de guardar.

Licores infundidos para cócteles especiales
Preparar licor de cannabis es más sencillo de lo que parece y puede transformar cualquier bebida en una experiencia única. Para hacer tu propio licor infundido se necesitará ron o vodka, el licor que se prefiera y 5-10 gramos de cáñamo o hachís.
- Calentar el cannabis a 120°C durante unos 40 minutos para activar sus propiedades.
- Mezclar el alcohol y el cáñamo/hachís en una olla grande.
- Calentar lentamente la mezcla sin llegar a hervirla.
- Filtrar la mezcla y almacenarla en un lugar fresco.
Otros platos con cannabis
El uso del cannabis en la cocina va más allá. Aquí algunas ideas para explorarlo:
Platos principales
- Pasta al pesto cannábico: usando el aceite infusionado con cannabis para un toque especial.
- Pollo marinado: utilizando la mantequilla de marihuana antes de asarlo.
Postres
- Tiramisú verde: se sustituye la mantequilla tradicional por mantequilla de marihuana.
- Helado cannábico: añadir leche infusionada a la receta favorita.
Aperitivos
- Hummus con aceite de oliva cannábico: un aperitivo saludable y relajante.
- Galletas saladas: perfectas para picar entre comidas y disfrutar del sabor discreto del hachís.
Estas recetas no solo permitirán experimentar con nuevos sabores, sino también disfrutar de los efectos del cannabis en formas creativas y deliciosas.

Técnicas culinarias clave para resaltar el cannabis
Cómo incorporar el cannabis en grasas y aceites
El cannabis en grasas es fundamental en la cocina cannábica. Al combinarlo con aceites o mantequillas, se maximiza la absorción de THC y otros cannabinoides, potenciando tanto el sabor como los efectos psicoactivos.
Dorar y saltear: resaltando los sabores a través del calor
Dorar y saltear son técnicas esenciales para resaltar los sabores del cannabis. Al calentar la hierba con grasa, se activa el THC, mejorando su integración en la receta.
Infusión en frío
La infusión en frío es ideal para preservar terpenos y flavonoides que pueden degradarse con el calor. Esto se logra al dejar reposar el cannabis en aceite a temperatura ambiente por un período extendido.
Reducción: concentrando el sabor y los cannabinoides
La reducción consiste en cocinar una mezcla líquida hasta que disminuya su volumen, concentrando así los sabores y cannabinoides, como pasa con las salsas.
Consideraciones importantes al cocinar con cannabis
Entender el efecto psicoactivo del cannabis en los alimentos es crucial. A diferencia de fumar, el efecto al ingerir cannabis tarda más en manifestarse y puede ser más potente y duradero. Este efecto puede tardar entre 30 minutos y 2 horas en aparecer y durar aproximadamente 8 horas. La intensidad del efecto varía según la dosis y el metabolismo de cada persona.
Por ello, se debe calcular y controlar adecuadamente la dosis de cannabis en las recetas para evitar experiencias incómodas o abrumadoras. Es recomendable empezar con dosis bajas, especialmente si es la primera vez que se cocina con cannabis o no se tiene mucha experiencia en el consumo.
Para garantizar una experiencia segura:
- Etiquetan las preparaciones indicando claramente que contienen cannabis.
- Indican la cantidad de THC por porción para que los consumidores puedan dosificar apropiadamente.
- Mantén los alimentos cannábicos fuera del alcance de niños y mascotas.
El uso responsable incluye evitar mezclar estos alimentos con alcohol y no conducir después de consumirlos. Seguir estas pautas hará que la experiencia culinaria con cannabis sea más placentera y segura para todos los involucrados.
El potencial terapéutico del THC en la cocina cannábica
Las propiedades del THC no se limitan solo a sus efectos psicoactivos. Este cannabinoide tiene beneficios medicinales y sensoriales clave que pueden mejorar la calidad de vida de quienes lo consumen. Entre los beneficios medicinales se pueden encontrar:
- Alivio del dolor: el THC puede actuar como un analgésico natural, ayudando a reducir dolores crónicos y agudos.
- Reducción de la inflamación: tiene propiedades antiinflamatorias que pueden ser útiles para personas con condiciones como artritis.
- Estimulación del apetito: ideal para quienes sufren de pérdida de apetito debido a tratamientos médicos como la quimioterapia.
- Mejora del sueño: puede ayudar a combatir el insomnio al inducir una sensación de relajación.
Para aprovechar estas propiedades, es fundamental asegurar la activación óptima del THC durante el proceso de cocción y horneado. Este proceso se conoce como descarboxilación, que convierte el THCA (no psicoactivo) en THC (psicoactivo).
Cómo asegurar la activación del THC:
- Descarboxilación previa: Antes de infundir cannabis en cualquier aceite o mantequilla, calienta los cogollos a 120°C durante unos 40 minutos hasta que adquieran un color marrón-dorado.
- Controlar la temperatura: Al cocinar con ingredientes infusionados, mantén temperaturas bajas a moderadas (menos de 160°C) para evitar la degradación del THC.
- Tiempo de cocción adecuado: No prolongues el tiempo de cocción innecesariamente, ya que esto también puede reducir la potencia del THC.
Explorar todas estas oportunidades de cocina cannábica no solo enriquece el paladar sino que también ofrece una nueva dimensión al disfrute del cannabis.
4 respuestas a «Cocina cannábica y sus básicos»
La manteca no tiene el thc descarboxilado. No sirve
Hola. Si sigue la receta de la mantequilla de marihuana, al limpiar las impurezas en agua caliente, descarboxila la marihuana. ¡Un saludo!
Hola aqueria saber tengo una planta macho pero ya lo deje secar en oscuridad , mi pregunta es la flores para que me puede servir en reposteria o trago ??
Sí el aroma, o sabor de la plata le resulta apetecible. Lo puede utilizar en ambas. Pero para aprovechar las propiedades de esta planta, la que realmente tiene un elevado contenido de aceites esenciales. Son las plantas hembra.