Es frecuente tener quemaduras en las hojas de marihuana, y esto puede suceder por diversas causas. Cualquier tipo de estrés que exista puede llevar a mostrar dichas quemaduras. Para ello, se puede tener un control sobre la evolución y el desarrollo del cultivo. Con la intención de identificar el problema y poner una solución lo antes posible, ya que si no se hace se puede perder el control del cultivo. Por eso, a continuación se cuenta todo sobre las hojas quemadas en la marihuana.
Tipos de quemaduras en las hojas de marihuana
Entre las diferentes causas de hojas quemadas en la marihuana están las siguientes:
Quemaduras causadas por la luz
Uno de los casos de quemadura más común que se da en el cultivo de semillas de marihuana es aquel generado por la altura del foco, cuando éste se encuentra a una distancia corta. Por este motivo, se debe conocer la altura correcta de los focos en el cultivo en interior, dependiendo del fabricante y la potencia. Así, se tiene la certeza de que se consigue la temperatura adecuada. Síntomas que denotan las quemaduras causadas por la luz:
- Cuando se da un exceso de luz, suelen aparecer decoloraciones de color amarillo tanto en el hoja central como en las zonas más próximas, ya que es la parte más cercana a la luz.
- La planta no tiene energía, por eso las hojas estarán caídas.
- Así, el cogollo irá tomando una coloración amarillenta, donde los pelos se teñirán de marrón.
- Se desprende un olor intenso que impregna el ambiente por la pérdida de terpenos.
En el caso de que la temperatura no sea demasiado alta para que se quemen las plantas, habrá que tener en cuenta la potencia lumínica del sistema de iluminación usado, la cual puede ser demasiado alta para que la planta pueda absorber todo con naturalidad y todo ello sin que aparezcan quemaduras. Si sucede habrá que subir el foco al doble de distancia que se tenía.
En exterior, no suele suceder esto salvo que la planta no se encuentre bien hidratada.
Hojas quemadas por exceso de riesgo y nutrientes
Otras de las quemaduras en las plantas de marihuana que aparecen se dan por exceso de riego o nutrientes.
Así en el caso de un exceso de nutrientes, se empezarán a notar quemaduras en la punta de las hojas que se tornan amarillas. Para evitarlo es aconsejable contar con medidores de PH y EC y trabajar con agua de calidad. Así se consigue que el pH se equilibre entre el 5,5 y el 6,5. De igual manera, la EC no debe sobrepasar el 0,6. Asimismo, en caso de que sea necesario combatirlo se deberá añadir al agua algún complejo enzimático con el que eliminar las raíces muertas del medio de cultivo.
En el caso de quemaduras causadas por un exceso de riego es más difícil de identificar, aunque se puede distinguir cuando la planta presente algún símbolo de quemazón en las hojas y el régimen de abonado esté siendo suave. Si la maceta lleva varios días sin perder humedad puede que esta sea la causa. Se debe tener en cuenta que el sistema radicular estará pudriéndose por el exceso de agua, haciendo que haya peligro de hongos perjudiciales o plagas.
Si se quiere evitar este problema, lo mejor es controlar el agua que se aplica en cada etapa de la planta. Lo ideal es que el sustrato se mantenga humedecido entre 1 y 3 días como máximo volviendo a regar cuando la maceta ha perdido la mitad del peso que tenía nada más regarla.
Por pulverización
Muchas veces se deben pulverizar las plantas con abonos foliares o con preventivos antihongos e insecticidas. A la hora de pulverizar hay que tener cuidado con la luz ya que sino puede causar quemaduras graves en tus plantas.
Para poder pulverizarlas hay que estar seguros de que un par de horas después no va a recibir luz excesiva, ni del sol ni de los focos de cultivo interior. Si lo hacemos en exterior habrá que realizarlo a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde.
Si se hace en interior, se deberá hacer justo antes de que se apaguen las luces, para que las partes pulverizadas se sequen y no queden gotas en la superficie.
Hojas quemadas por el viento
La más desconocida de las quemaduras es la que produce el ventilador en las plantas. Una corriente de aire directa en las plantas puede producir quemaduras en las hojas de marihuana.
Aunque sea oscilante, si cuando el ventilador pasa mueve en exceso la planta, la hoja se seca más rápido que se hidrata, entonces se acaba secando la hoja y cayendo. Estas quemaduras suelen darse en la zona más alta de las plantas, donde le da el ventilador en las copas, y la planta más cercana al ventilador es la que lo sufre. Para identificarlo habrá que observar la curvatura de la planta hacia abajo y sus bordes se queman.
Bajando la velocidad del ventilador o alejándolo de las plantas se consigue frenar las quemaduras. Dentro de un armario, lo mejor es poner varios ventiladores de baja potencia en vez de uno solo y potente, ya que sino será prácticamente imposible alejarlo al carecer de espacio.
Además, si se roza con ciertos objetos puede generar roturas o heridas en diferentes partes de la planta que pueden llevar a una infección.
Éstos son los tipos de quemaduras más frecuentes en el cultivo de marihuana. Es importante conocerlos y aprender a diferenciarlos para saber cómo reaccionar.
