La poda de la marihuana es un proceso que puede proporcionar muchas ventajas al cultivo. El objetivo principal es compensar el nivel de energía que la planta destina a cada uno de los recursos. Para conocer más sobre los tipos de podas en la marihuana que se pueden realizar, aquí se encuentra toda la información.
Por qué podar la marihuana
La poda de marihuana cuenta con diferentes beneficios. Algunos de ellos son:
- La mejora en la calidad de los cogollos, al concentrar toda la energía y los nutrientes en la formación de cogollos, lo que lleva a una mayor producción de resina y calidad.
- Permite controlar el tamaño y la forma de la planta, siendo especialmente interesante para el cultivo en interior, donde el espacio es limitado.
- Mejora el flujo tanto el aire y la luz ayudando a mantener un ambiente saludable para las plantas.
Tipos de podas en plantas de marihuana
Dependiendo de la planta y de lo que se quiera conseguir se puede escoger entre los múltiples tipos de podas de marihuana que existen. Existen múltiples tipos, como la poda Pizzicato, no obstante algunos de los más empleados son los siguientes:
Poda apical en marihuana
La poda apical consiste en cortar la punta principal de la planta, llamada rama apical o yema, de donde brotan hojas pegadas al tallo, de este modo se obtiene una bifurcación del tronco en forma de (Y).
El objetivo de la misma es retrasar el crecimiento vertical y enviar más fuerza a las ramas laterales, obteniendo una planta más ramificada y de una altura moderada. Suele realizarse cuando se cultiva con la malla en SCROG. Con ella se conseguirá ganar anchura, sacrificando altura, siendo idónea para sativas de larga floración, las cuales suelen crecer más.
Se deberá reconocer bien la parte de la planta a cortar, que es la llamada yema o rama apical desde donde brotan pegadas al tallo, donde se encuentra una alta concentración de auxinas que se usan para el crecimiento de ramas secundarias.
Se debe aplicar a partir del tercer nudo de hojas, cortando el tallo central, a partir del tercer nudo contando desde abajo.
Si se nos queda un agujero demasiado grande en el tronco por donde pueda entrar aire o suciedad, habrá que taparlo con pasta cicatrizante para plantas, para evitar pudriciones. Un truco para solucionarlo si no se tiene pasta selladora cicatrizante, es colocar un poco de cera de vela, pero no durará tanto tiempo como la pasta selladora.
Solo se debe esperar a que crezcan los nuevos brotes y se reconozcan como punta central. La planta repartirá la producción que iba a dar en una punta en las dos por igual, ya que estarán a la misma altura y las dos serán reconocidas como central. Se puede seguir podándola mientras va creciendo durante la fase vegetativa.
Poda FIM en la marihuana
La poda FIM es muy parecida a la poda apical, ya que en ambas se les corta el brote superior, pero a diferencia de la apical con este tipo de poda se corta el 80% del nuevo brote. El efecto de esta poda es obtener de 4 a 6 nuevos tallos principales juntos en la parte superior de la planta. De este modo, se aumentan los rendimientos con un sencillo corte. Para tener un gran éxito en este tipo de poda la clave está en no cortar totalmente el ojo central de la planta, ya que sino pasará a ser una poda apical.
Es una poda que se puede aprovechar muy bien en nuestros cultivos de plantas madre. Cuando se empieza de nuevo con un esqueje para conseguir una madre nueva, se puede hacer la poda FIM desde pequeña, consiguiendo el máximo número de ojos desde el primer momento. Una buena planta madre tiene que tener muchos ojos de donde sacar ramas, y con esta poda se tendrá desde el principio.
Buscar el tercer nudo y hacer la poda FIM en el siguiente, como en la apical. Habrá que cortar dos tercios del nuevo brote, dejando solo el 20% del nuevo nudo, como dejando solo el tallo y el principio de las hojas nuevas.
Se debe esperar a que la planta crezca y se recupere, si se tiene un periodo de crecimiento largo como en las plantas de temporada, será posible hacerlo 2 o 3 veces antes de que florezca. Con ella se consigue una gran bola de cogollos, ideal para el cultivo exterior en zonas donde se requieran plantas más discretas y camuflables.
Poda lollipop o poda de ramas bajas
Este tipo de poda trata de eliminar las ramas bajas para conseguir más fuerza en el ojo central de la planta. Se suele hacer en el cultivo interior, para poder poner más plantas juntas y que todas tengan la parte más productiva expuesta a la luz. El objetivo es conseguir un gran vigor en el tercio superior de la planta. Subirá la producción, ya que no tendrá ramas laterales alejadas de la luz, es decir aquellas que no son productivas.
Para hacerlo bien, habrá que seguir la poda lollipop paso a paso:
- Es aconsejable plantar de 16 a 25 semillas por lámpara.
- Se les proporciona un crecimiento normal y sobre el día 15-18 desde que se germina se pasan a floración.
- Las plantas crecerán a lo alto, pero a lo ancho sacarán poca fuerza, ya que hay muchas plantas alrededor.
- Cuando se empiecen a ver los primeros pelos de las flores, será un indicativo de que se tiene que hacer la poda.
- Se quitan todas las ramas bajas de la planta, llegando a dejar prácticamente la punta central y uno o dos nudos más como máximo.
- Habrá que colocar tutores a las plantas obligatoriamente, ya que se formarán largas y finas. Si no se les ayuda a soportar el peso del cogollo central, las células de nuestras plantas se dedicarán a crear el tronco. Si se les ayuda con el tutor, no dejarán de engordar hasta el último momento, dándole la máxima fuerza a la flor.
- En poco tiempo, se estabilizarán en floración, y tendrán un manto de cogollos sin apenas hojas que manicurar.
Poda LST de marihuana
La poda LST o Low Stress Training es una técnica que se aplica mayormente en cultivos en interior, pero con el paso del tiempo muchos cultivadores de exterior han adoptado esta forma de cultivo por sus ventajas. El LST permite combinar los beneficios de la poda apical con técnicas de doblado para que la planta se desarrolle en horizontal.
Sin embargo, cada cultivador decide cuándo aplicar el sistema LST, ya que esta técnica controla la altura a la vez que aprovecha la cantidad de luz emitida bien por nuestra bombilla de alta presión o por los rayos de luz.
Cada rayo de luz o lúmen, es de menor intensidad a medida que encuentra obstáculos en su paso por la planta, ya sean por hojas, ramas o sombras proyectadas de otro lugar. Un cultivo con LST es sin duda la forma más efectiva a la hora de aprovechar los lúmenes de las bombillas. Por lo que se obtiene una mayor cantidad de cogollos en la fase final de la floración de las plantas de marihuana.
- Se realiza una poda apical.
- De ahí saldrán dos ramas laterales que habrá que atar a tutores a medida que crezca. La idea es abrirla para que abarque la máxima superficie.
- De cada rama horizontal saldrán tallos verticales desde donde crecen cogollos.
Se puede fusionar con otras podas como la apical, consiguiendo más brazos mezclándose éstas técnicas en cultivos largos de exterior, donde se tiene la planta en crecimiento durante varios meses.
Estos son algunos de los distintos tipos de podas en marihuana que se pueden aplicar en nuestros cultivos para mejorar las cosechas, para todo tipo de cultivador, de clima y de espacio de cultivo, tanto en interior como exterior.