A pesar de no saberse con certeza el origen de la marihuana en la vida del ser humano, los hallazgos más remotos de restos de cannabis en la civilización datan del séptimo milenio a.C., durante el Neolítico. Desde entonces, se ha empleado durante miles de años como remedio medicinal, como parte de rituales religiosos y de forma recreativa en eventos sociales. Más tarde, llegaron las prohibiciones como resultado de campañas de odio hacia la planta y su actual y lenta despenalización.
¿Qué es la marihuana?
La marihuana es el nombre popular por el que se conoce al fruto del cannabis, el cual tiene efectos psicoactivos por su alto contenido en THC. Por esta condición ha estado totalmente prohibida en prácticamente todo el mundo durante décadas, tendencia que se está revirtiendo durante los últimos años muy lentamente.
En total, cuenta con más de 100 cannabinoides, las sustancias químicas que se encargan de dotar a la marihuana de sus beneficios y efectos secundarios.
Una de las teorías del origen de la denominación “marihuana” es que fue una denominación inventada por el comisario de Narcóticos del gobierno de EE.UU. Harry Anslinger, uno de los mayores impulsores de la prohibición de la planta. Provendría de la fusión del nombre “María Juana”, término que se utilizaba de forma peyorativa para denominar a los inmigrantes informales mexicanos que defendían el uso del cannabis.
¿Cuál es el origen de la marihuana?
Son dos los orígenes del cannabis que pueden explicarse. Por un lado, el origen genético de la planta y, por otro, el origen histórico vinculado al ser humano y el lugar que le ha dado a la marihuana.
Origen genético de la marihuana
Fue el físico y botánico Carlos Linneo quien creó en 1753 el actual modelo de clasificación y denominación del cannabis, aunque actualmente todavía hay opiniones desacordes al respecto.
La primera teoría dice que el cannabis se clasifica en tres especies diferentes: Cannabis sativa, Cannabis índica y Cannabis ruderalis. La segunda afirma que existen tres subespecies de cannabis que derivan de una misma especie, el Cannabis Sativa. En cualquier caso, las genéticas sativa, índica y ruderalis poseen características bien diferenciadas que permiten identificar cada planta aunque se encuentren juntas en una misma zona de cultivo.
- Marihuana sativa. Marihuana originarias de zonas de clima tropical donde se desarrollan con un elevado crecimiento vertical, siendo una planta alta y alargada. Este cannabis suele tener sabores terrosos y combustibles, con efectos estimulantes.
- Marihuana índica. La historia de este cannabis comienza en las frías montañas de Nepal e India. Por las condiciones climáticas, esta marihuana ha acortado su floración y crea árboles frondosos de hoja ancha. No suele medir más de metro y medio de altura y sus sabores son dulces, mientras que sus efectos son sedantes.
- Marihuana ruderalis. Son plantas muy bajas y con una fase de floración más corta. Además, no son fotodependientes debido a su origen: Siberia y Rusia central, donde el sol escasea y del cual no puede depender de él para sobrevivir. No se utiliza para cultivar por su escaso nivel de THC pero es la responsable de que existan las actuales semillas autoflorecientes.
Origen histórico del cannabis
La planta de marihuana es originaria de la región desértica situada al sureste del mar Caspoio, en Asia central. Su vinculación con el ser humano comienza en el Neolítico, cuando se empieza a cultivar y domesticarla, sirviendo como alimento, medicina y como parte de ciertos ritos religiosos, entre otros fines.
Durante esta época fue extendiéndose; primero hacia China y más adelante hacia el oeste, por donde llegaría a la zona europea actual. Posteriormente, se expande por todo el territorio de Europa. En ese entonces, una de las prácticas más utilizadas consistía en quemar las semillas de cannabis en un brasero para inhalar el humo y alcanzar estados místicos.
En España, se ha probado la presencia de cannabis desde el Calcolítico (3.000 a.C. – 1.700 a.C.). Concretamente en Totana (Murcia) donde se encontró a una mujer enterrada cubierta de una estera de cáñamo que actuaba como sudario.
Las tribus indoeuropeas también tuvieron un papel fundamental en la expansión del uso de la planta de cannabis por Asia y Europa. De hecho, se sabe fue muy conocida en China y en la India, pues se menciona en los Vedas como la bebida favorita de indra y en los tratados médicos del siglo I en China.
La primera ilustración de la planta de cannabis data del siglo VI y apareció en un libro de botánica llamado Constantinopolitanus; mientras que la primera información científica se ha encontrado en la enciclopedia médica de 16 tomos que redactó Aecio de Amida.
Aunque en el siglo V se prohibiera en territorios cristianos por vincularse con los seguidores de Satá, y en el siglo XIV por los Islámicos; no desapareció porque tenía un importante papel en la elaboración de fibras para ropa, cuerdas, papel y algunos medicamentos en ciertas zonas.
Resurgimiento del cannabis
En el siglo XVI en EE.UU. y Portugal se plantaba el cannabis para aprovechar sus fibras, pero la gran cantidad esclavos llegados de Brasil estaban más interesados en sus efectos psicoactivos, empleados con fines religiosos y festivos. Dos siglos más tarde, los indígenas y mestizos rurales portugueses adaptaron el consumo medicinal de la marihuana, lo que se trasladó a la clase alta del país, así como a Brasil y al Carible a finales del siglo XIX.
Así volvió la moda del consumo de cannabis en Europa, también alentado por las tropas napoleónicas que habrían viajado hasta Egipto y adoptado sus costumbres. En 1835 se fundó el Club de los Hashichines para realizar investigaciones médicas en torno al cannabis.
Historia reciente del cannabis: restricciones del siglo XX
A pesar de su auge en todo el mundo, los estadounidenses tenían la convicción de que la marihuana había causado la depravación de las personas de color y de los mexicanos. Por ello, para acabar con ella, el magnate de los medios de comunicación americano William Randolph Hearst utilizó todos sus medios para desacreditar al cannabis en una campaña en la que lo denominaba como “marijuana”.
Entonces comenzó un nuevo capítulo para la historia del cannabis, con prohibiciones que se extendieron por todo el mundo: en 1937 en EE.UU, y de forma mundial en 1961 con la Convención Única de Drogas de las Naciones Unidas. La situación no se actualizó hasta que en 2013 Uruguay legalizó el cultivo, la venta y la distribución. Colorado (EEUU) le siguió permitiendo el uso recreativo de la planta, al igual que hizo Canadá en 2018 y otros estados de América del Norte.
Actualmente, muchos países del mundo han aprobado el uso de la planta de marihuana ya sea para uso medicinal o recreativo y, en los que no, se ha abierto el debate.
Orígenes de la marihuana medicinal
Por su parte, la historia de la marihuana medicinal va muy unida a la del cannabis medicinal. En china ya se escribió sobre sus beneficios más de dos mil años antes de Cristo, siendo el propio emperador, Shen Nong, quien la empleaba para tratar varias de sus dolencias. Los griegos lo suministraban a sus caballos para curar las secuelas de las batallas, y los egipcios lo usaban para tratar el cáncer. Éstos son sólo algunos ejemplos, pero la historia del cannabis medicinal es casi tan antigua como la planta.
