Algunos cultivadores, especialmente los recién llegados, a menudo se preguntan cuándo deben empezar a usar abonos en sus plantas, aunque esto depende de diversos factores como el método de cultivo, la variedad escogida y la fase en la que sus plantas se encuentren, entre otras cosas. Así pues, para despejar esta y más dudas, en este artículo hablaremos de cuándo empezar a usar abonos en marihuana.
Abonos para marihuana
Los abonos o fertilizantes son de muy importantes para proveer los nutrientes necesarios que las plantas necesitan para crecer de forma saludable, maximizando así la cosecha y su potencia. De no fertilizarlas adecuadamente, las plantas pueden acabar padeciendo alguna deficiencia nutricional, la cual puede verse reflejada en un retraso del crecimiento, mal desarrollo de las flores y cosechas de peor calidad.
Por otro lado, al fertilizar nuestras plantas, estaríamos otorgándoles una mayor resistencia ante plagas, enfermedades y otros factores de estrés, asegurando así una cosecha exitosa. Sin duda, usar abonos en marihuana es una práctica obligatoria si se quieren conseguir producciones más sanas, productivas y de mayor calidad. Existen múltiples fertilizantes como Fulvic de Terra Aquatica con el que proporcionar a las plantas un crecimiento vegetativo acelerado
Nutrientes esenciales para las plantas de marihuana
Las plantas de marihuana necesitan ciertos nutrientes para poder crecer y desarrollarse. Estos son cruciales para llevar a cabo procesos fisiológicos y para la salud general de la planta. Algunos son:
- Nitrógeno (N): esencial para la etapa vegetativa, ya que promueve el correcto desarrollo de las hojas y del tallo. También juega un papel importante en la producción de clorofila.
- Fósforo (P): muy importante para el desarrollo de las raíces, pero especialmente para la etapa de floración, ya que la planta necesita más energía para producir los frutos.
- Potasio (K): ayuda a obtener un crecimiento vigoroso, así como para el desarrollo de las raíces y la absorción de nutrientes. También ayuda a proveer resistencia contra enfermedades y estrés.
- Calcio (Ca): necesario para la formación y estabilidad de la pared celular. Ayuda a prevenir desbalances nutricionales y a corregir varios desórdenes fisiológicos como por ejemplo la podredumbre apical.
- Magnesio (Mg): componente principal de la molécula de clorofila, elemento esencial para llevar a cabo la fotosíntesis. Muy importante para la producción de hojas verdes completamente sanas.
- Azufre (S): componente de aminoácidos y proteínas, esencial para el crecimiento y desarrollo general de la planta.
Tipos de abonos
Cuando se empieza a emplear fertilizantes para las plantas de marihuana, podemos encontrar diferentes tipos en el mercado. Cada uno ofrece diferentes ventajas dependiendo de tus preferencias y objetivos a la hora de cultivar tus plantas.
Naturales
Los abonos orgánicos se elaboran a partir de ingredientes naturales ricos en materia orgánica. Estos liberan los nutrientes lentamente a medida que se van descomponiendo, proporcionando una fuente de nutrientes constante y sostenible para tus plantas de marihuana. Además, muchos cultivadores los prefieren porque mejoran la estructura del suelo y la actividad microbiana, favoreciendo así la salud general de la planta.
Sintéticos
Los fertilizantes sintéticos o artificiales están fabricados para dar a tus plantas las proporciones correctas de nutrientes para su absorción. Son especialmente conocidos por su rápida acción, siendo especialmente adecuados para su uso en sistemas hidropónicos o para cuando se quiere corregir algún parámetro nutricional de forma rápida. Estos abonos están disponibles con diferentes formulaciones e índices de NPK para las diferentes etapas de crecimiento de las plantas de marihuana.
Cuándo empezar a usar abonos en marihuana
En función de la fase en la que tus plantas se encuentren, estas necesitarán ciertos nutrientes en diferentes proporciones. Necesitarán más nitrógeno para la etapa vegetativa y más fósforo y potasio para florecer. Las plantas de cannabis absorben grandes cantidades de estos y otros nutrientes, de manera que si no se los suministramos en el agua de riego, nuestras plantas acabarán mostrando signos de deficiencias mediante manchas en sus hojas.
Plántulas
Las primeras semanas tras la germinación, las plántulas de cannabis pueden desarrollarse perfectamente sin apenas suplementación. Lo mejor es utilizar un abono ligero y equilibrado con una baja concentración para no estresar a nuestras delicadas plantas. Empezaremos con pequeñas dosis y las iremos incrementando a medida que la planta crezca.
Etapa vegetativa
Para empezar a aportar nitrógeno en la fase vegetativa o de crecimiento, hay que esperar a que el sistema radicular de nuestra pequeña planta coja fuerza. Al principio, solo necesitará humedad para germinar y crecer durante sus primeros días; pero cuando pase a crecer más rápido, deberemos aplicar un abono de crecimiento.
Etapa de floración
Cuando empecemos a ver las flores hembra, será el momento de usar abonos de floración. Al igual que en crecimiento, empezaremos poco a poco con la dosis mínima y, riego a riego, la iremos subiendo gradualmente hasta alcanzar el máximo recomendado por el fabricante.
Deficiencias nutricionales
Las deficiencias nutricionales pueden manifestarse de diferentes maneras, pudiendo afectar a la salud, crecimiento y producción general de las flores de marihuana. A continuación, expondremos algunas de las deficiencias más comunes:
Nitrógeno
Síntomas:
- Las hojas más bajas empiezan a volverse de color amarillo desde las puntas hacia el resto de la planta.
- Crecimiento reducido de los ejemplares y hojas más pequeñas.
- Apariencia generalmente amarillenta o pálida.
Solución:
- Aplicación de fertilizantes ricos en nitrógeno.
- Ajustar los niveles de pH adecuados en el medio de cultivo para optimizar la absorción de nutrientes.
Fósforo
Síntomas:
- Hojas de color verde oscuro o púrpura.
- Crecimiento lento y desarrollo atrasado de la planta.
- Tallos oscuros y frágiles.
- Retraso del periodo de floración.
Solución:
- Aplicación de abonos con altos niveles de fósforo.
- Ajustar los niveles de pH para mejorar la absorción de fósforo.
Potasio
Síntomas:
- Los bordes de las hojas se vuelven de color amarillo e incluso marrón, llegando a parecer quemados.
- Tallos débiles y pobre desarrollo de las flores.
- Mayor susceptibilidad a plagas y enfermedades.
Solución:
- Escoger un fertilizante con altos niveles de potasio.
- Mantener un pH adecuado para mejorar la absorción de potasio.
Recomendaciones
Para garantizar el buen desarrollo de tus plantas, hay que tener en cuenta algunos puntos clave cuando decidas empezar a utilizar abonos en marihuana:
- Tener en cuenta los parámetros de la tierra para conocer la composición de nutrientes, los niveles de pH y las posibles deficiencias.
- Empieza con una dosis baja para observar la respuesta de las plantas al abono escogido sin correr el riesgo de sobrefertilización.
- Los signos comunes de sobrefertilización incluyen puntas o bordes de hojas quemadas, amarilleo o oscurecimiento de los márgenes de las hojas, rizado o torsión de las hojas, etc.
- Usa un medidor de pH para asegurar que la tierra o solución hidropónica se encuentra dentro del rango recomendado para el crecimiento de marihuana (por lo general, entre 6.0 y 6.8 para tierra).
- Si ves algún signo de sobrefertilización o desequilibrio de nutrientes, ajusta el fertilizante de inmediato.
En conclusión, empezar a usar abonos es crucial para alcanzar una producción exitosa. Si se conocen las diferentes etapas de crecimiento y qué nutrientes necesitan nuestras plantas, sabremos perfectamente cuándo y cómo usar fertilizantes, lo que finalmente conducirá a plantas de marihuana más saludables y cosechas abundantes de mayor calidad.