Animales que se drogan, no es algo típico y solo del ser humano, si no que también los animales usan sustancias psicotrópicas, cuando se dice que estando con el cojo se aprende a cojear, en la naturaleza podemos encontrarnos varios ejemplos de psiconautas, hay quien dice que lo descubren por casualidad, hay quien dice que es algo casi necesario dentro del mundo animal, que sea para uso terapéutico o que sea para evolucionar, muchos animales suelen ser víctimas de los efectos de varias plantas con propiedades psicotrópicas.
Los gatos, por ejemplo, adoran la nepeta cataria, planta de la familia de la menta, los gatos comen las hojas, se excitan sexualmente y en algún caso que otro llegan hasta en perder su sentido de equilibrio, se vuelven torpes, juguetones y babean, llegando alcanzar un estado confusional que les dura pocos minutos; existe también una planta que les hace el efecto opuesto, conocida como coleus canina, tiene el poder de espantar a los perros y a los gatos. La cosa curiosa, es que a nuestra nariz, su olor nos recuerda el cannabis en todo! Eso nos hace suponer que esta planta puede presentar beta cariofileno, terpeno que usan los perros policías para encontrar el cannabis.
Al igual que los gatos caseros usan la nepeta cataria, los grandes felinos usan la Banisteriopsis caapi, conocida como ayahuasca, los jaguares son los felinos que pueden disfrutar de su viaje, el mismo que buscan chamanes en sus rituales, se suele usar, se supone, por ambas partes para agudizar los sentidos para la caza.
Los murciélagos saben muy bien que la fruta, una vez madura y con su elevado contenido de azucares, empiezan a fermentar y producen de forma natural, alcohol, y eso les atrae, curiosamente pero su estado de embriaguez no afecta a su vuelo, la fermentación de las azucares de la fruta no solo atraen a los murciélagos, si no también a los elefantes, juntos a varios tipos de monos, se vuelven locos para comer la marula, fruta muy sabrosa y refrescante pero que alcanza hasta los 38º!!
Al club de los alcohólicos podemos añadir el mono vervet del África occidental, hay una isla en el caribe, donde este mono hacia compañía a los trabajadores de caña de azúcar, pero, cuando alguno de ellos probó alguna caña fermentada, experimentó los mismos efectos de los elefantes antes mencionado, aunque hoy en día les resulta más fácil asaltar a los turistas con sus bebidas!! En esta isla se puede hacer una estadística entre los monos alcoholistas y abstemios, y parece que los monos que se suelen poner más borrachos, resultan ser los mejores líderes y con más carisma.
La musaraña es un roedor que también es un aficionado bebedor de alcohol, suele preferir el vino de palma, que alcanza unos ligeros 4º.
Uno de nuestros más fieles aliados, el caballo (el cuadrupede…!), también es un fiestero de cuidado, su hierba fiestera favorida es la Locoweed, así le llaman, Astragalus And Oxytropis, son plantas que tienen un alcaloide muy particular, la swainsonina, alcaloide que afecta al sistema nervioso central, y parece que necesita 2 semanas de consumo para empezar a notar un efecto, eufórico, pérdida de peso, se vuelven torpes.
Hay un lémur en Madagascar, que sabe cómo alcanzar un estado de éxtasi mientras hace su limpieza de parásitos, hay un milpiés que segrega sustancias venenosas para defenderse, el lémur aprovecha estas sustancias, entre las cuales, cianuro, y eso aleja todo tipo de parasito y el mosquito que transmite malaria también, como recompensa de su limpieza, tiene una experiencia parecida al éxtasi, quizás más intensa. Esta misma adicción la tiene el mono capuchino también.
Los mandriles parece que antes de una pelea, usen la ayuda de una planta que se llama iboga, que en dosis alta puede ser muy muy peligrosa, en dosis bajas puede causar alucinaciones, que pueden durar más de 10 horas, y los efectos se pueden notar hasta 96 horas después de la toma, su principio activo se queda en las células grasas y actúa como antidepresivo, de forma parecida al LSD. Se supone que les aumenta fuerza y disminuye la sensación de dolor.
Los ualabi son canguros enanos, parecen muy simpáticos y tiernos, hasta que encontraron los campos de marihuana que se cultivan en el sur de Australia por fines terapéuticos, leyendas cuentan de círculos en el trigo, o crop circle, hechos por los ualabi en su estado psicotrópico.
Los carneros de Canadá conocen muy bien todas las plantas de la zona, y en su zona hay un liquen que tiene unas propiedades psicotrópicas. Restriegan sus dientes contra el para tener sus efectos, muy intensos y alucinógenos, y parece que los renos de Escandinavia hagan algo parecido con la ayuda de la amanita muscaria, la seta que vemos en todo cuento de hada, que buscan esta seta hasta por debajo de la nieve. Se supone que la leyenda de santa Claus, o papá Noel, con los renos voladores, viene de una visión de los samis, pueblo indígena de Escandinavia, los cuales usaban amanita muscaria para sus visiones adivinatorias y a veces, hasta la orina de los renos que estaban bajo los efectos de la amanita. Sensación de volar y agudeza de los sentidos.
Esta última seta parece que atrae a las moscas también, de allí el nombre «muscaria», donde se apoyan en su caparazón rojo y se quedan en estado de total parálisis. Se ha visto que las moscas adoptan un comportamiento parecido al nuestro en los casos amorosos, donde, las moscas que vienen rechazadas ahogan sus penas en fruta que contiene alcohol, mientras que las moscas que recién han conseguido reproducirse, se nutren de la fruta que no contiene alcohol.
Entre los peces también podemos encontrar psiconautas, en más de una ocasión se acercó el hombre con el delfín, este último se ha reportado en varias ocasiones un tipo de comportamiento muy extraño, donde con el uso del pez globo, venenoso animal que genera una neurotoxina para nosotros mortal mientras que para el delfín resulta ser simplemente psiquedelico. Casi siempre se ha registrado ese comportamiento en grupo.
Desde que el mundo es como lo conocemos hoy, desde que hubo animal en la tierra, la atracción hacia una alteración del proprio estado psíquico ha sido siempre cosa natural, hasta algunos dinosaurio que otro reveló ser positivo al ácido lisérgico (LSD), nosotros hemos ampliado el uso de estas plantas no solo de forma terapéutica o para evolucionar, si no también de forma lúdica.
Autor: Fabio Inga
